Información útil

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La edad mínima para someterse a una operación estética se fija en los 18 años de edad y no se recomienda realizarla antes a menos que sea la solución a algún problema físico o psicológico importante, como podría ser la operación de las orejas de un niño que es ridiculizado en la escuela por tenerlas demasiado salidas, una rinoplastia en el caso de una persona con problemas respiratorios o la reducción de senos demasiado grandes que podría causar problemas en la columna vertebral.

Pero en cualquiera de estos casos, la operación a un menor tendrá que ser autorizada tanto por los padres y el cirujano como por un psicólogo que la justifique.

En cambio no se puede establecer ningún límite de edad, no está marcado por un número, sino por la salud individual de cada paciente.

Uno de los grandes problemas de la Cirugía Estética es que ha sido vinculada a un montón de publicidad engañosa. Antes de someterse a una operación es muy importante estar bien informado y buscar un cirujano plástico bien calificado y no dejarse engañar por la publicidad que ofrece resultados maravillosos, sin cirugía, anestesia o dolor y con una consulta inicial gratuita, ya que sin duda, detrás de todo esto no habrá un profesional calificado y honesto, ni un centro con las instalaciones médicas adecuadas y necesarias.

Cualquier cirugía implica un riesgo y el deber del cirujano es garantizar que este riesgo es mínimo, por lo tanto, deberá poseer la mayor experiencia posible para poder hacer frente a cualquier de las posibles complicaciones.

Solo si la operación se lleva a cabo en un buen centro sanitario con las instalaciones necesarias que marca la ley y con un anestesiólogo, se podrá decir que hay un control de los riesgos y posibles complicaciones que pudiesen surgir.

La salud del paciente es determinante, ya que si esta sano hará que los riesgos sean mínimos y habrá menos posibles complicaciones anestésicas.

Para estar lo más seguros posible de que no habrá ningún riesgo, el paciente deberá someterse a un estudio preoperatorio antes de cualquier intervención y tendrá que firmar un consentimiento informado, un documento que informa de las diferentes complicaciones que podrían surgir y su gravedad. Este documento, firmado, indica que el paciente ha sido previamente informado de los riesgos potenciales y que conoce el procedimiento de la intervención que se llevará a cabo.

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